El alza indiscriminada en las tarifas de servicios públicos, especialmente de energía y sobre todo en la Costa Atlántica, amerita un amplio debate nacional.
Lo que se vive hoy en el Caribe colombiano desde hace rato entró en crisis, originada por la privatización que asumió ELECTRICARIBE, una historia conocida por todo el país. No puede ser que en el Caribe el costo en las tarifas de energía haya subido cerca de un 45%, no hay bolsillo que resista una embestida de esas.
La gente hoy vive un doble calvario, es que prácticamente trabajan para pagar las onerosas tarifas de servicios públicos y ¡así no es! Y por si fuera poco, por otro lado, la inflación desbordada que sigue superando el 12%, una herencia del pasado gobierno.
Por eso, en buena hora el gobierno del presidente Gustavo Petro, sugiere la intervención de la Comisión de Regulación de Energía y Gas -CREG- por parte del Ministerio de Minas y Energía, que tendrá la ardua labor de buscar fórmulas que frenen el incremento en las tarifas.
Un ente que ha venido pasando de agache en el actual debate. Esta entidad se había convertido en una especie de rueda suelta, sin resultados a la vista.
Ojalá el Ministerio de Minas escuche el clamor de algunos sectores que piden con urgencia que se convoque a los generadores para lograr acuerdos de actualización de los contratos bilaterales que reflejen la realidad tarifaria.
Aunque esa tarea no es fácil, se conoció por parte del Gerente de la Empresa Air-e, Jhon Jairo Toro, que el servicio de energía no va a bajar por la inflación, aseguró “que por ahora las tarifas de energía no van a bajar mientras la inflación siga con ese comportamiento”, anunciado este tipo de reacciones, lo que debe hacer el gobierno nacional es buscar consensos y fórmulas efectivas para frenar lo que a todas luces es un abuso evidente del cual viene siendo testigo silencioso el país desde hace varios años. Sin embargo, el Presidente de EPM, Jairo Carrillo, manifestó que esta empresa hará el máximo esfuerzo al cobrar en su fórmula la tarifa mínima autorizada por la CREG, lo que fue centro de aplauso por parte de los asistentes al Congreso Nacional de ANDESCO en Cartagena.
Colombia debe dar el salto en Transición Energética, pero de manera justa, donde se logre un consenso general con los usuarios, las empresas, los gobiernos departamentales y locales y por supuesto los gremios. La principal decisión que arroje ese diálogo generalizado entre todos los actores, debe ser que el bolsillo de la gente no debe seguirse viendo afectado, que haya justicia tarifaria y un servicio de buena calidad.
Esperamos que no se les vayan las luces a algunos, en las rondas de acercamiento para ponerle fin a uno de los problemas más comunes y que es el clamor de millones de colombianos.
En buena hora hubo transición de gobierno.