La valiente Francia Márquez

Opinión Por

Francia Márquez, aquella mujer caucana, afrodescendiente, que ha sido víctima directa de la violencia, esa que se vive en la otra Colombia; ha logrado emprender a pesar de las enormes dificultades de seguridad una gran cruzada en defensa de nuestro Medio Ambiente y eso, precisamente le ha ocasionado ser víctima de desplazamiento forzado y de una gran cantidad de hechos que han puesto en riesgo, incluso, hasta su integridad física.

Francia, ha logrado liderar durante muchos años valiosas causas. Desde su juventud, emprendió una lucha legal para evitar la entrega de títulos mineros en Buenos Aires, Cauca, su tierra natal, situación que le daría un desplazamiento masivo en su comunidad. Meses después a este proceso jurídico, la Corte Constitucional falló una tutela y le dio la razón a Francia, suspendiendo tales títulos.

Este hecho, le produjo amenazas de paramilitares que operaban en la región, logrando que Francia dejara su comunidad. No obstante, su lucha continúo meses más tarde, desde otro municipio en el Cauca, donde la valiente mujer emprendió otra cruzada para evitar  la extracción ilegal de oro; minas que utilizaban altas proporciones de mercurio, generando un grave impacto ambiental, sobre todo en las fuentes hídricas de la región.

Ese trabajo riguroso, juicioso y de compromiso permanente para evitar la depredación ambiental en una de las regiones más ricas de Colombia, estaba siendo observado por organizaciones internacionales que se interesaron por el valioso ejercicio que Francia, junto a otras 80 mujeres y un puñado de comunidades afro del norte del Cauca venían desarrollando en tal propósito.

Y es que el activismo en favor del medio ambiente, su liderazgo social y su representación genuina de la mujer negra y de las comunidades afrodescendientes no ha sido en vano. Francia, ¡es nuestro Premio Nobel de Medio Ambiente!, un premio de muchos quilates a nivel internacional.

La Fundación Goldman en abril de 2018 le concede a Francia el Premio Goldman, (considerado el Nobel de Medio Ambiente), por su trabajo comunitario, liderazgo ambiental y su lucha por la defensa de sus territorios y sus actividades tradicionales. Convirtiendo a Francia en un referente internacional y en una de las principales activistas ambientales de nuestro país.

Hoy ella, lucha desde su región, a pesar de las vicisitudes, por visibilizar las amenazas ambientales, por garantizar un Medio Ambiente sano y en Paz con la Naturaleza, sin embargo, la violencia parece ensañada con ella.

El pasado 4 de mayo cuando se encontraba junto a otros líderes sociales reunidos en Santander de Quilichao, abordando temas de seguimiento a los acuerdos con el Gobierno Nacional durante la reciente minga, Francia y los demás acompañantes fueron víctimas de un atentado con granadas y disparos, los cuales generaron pánico entre los asistentes, sin embargo la rápida reacción de sus valientes escoltas quienes resultaron heridos, mitigaron el ataque, que hubiera terminado con resultados nefastos.

Ese acto vil y cobarde lo rechazamos desde todo punto de vista, más aún cuando los victimarios materiales son menores de edad, quienes desde muy temprana edad son cooptados por bandas criminales para atentar contra ciudadanos de bien que todos los días luchan por un mejor país.

La quieren silenciar, nadie comprende aún por qué una mujer tan valerosa y con ese liderazgo innato que desborda las fronteras y que pide a gritos no más maltrato ambiental le estorba a unos pocos.

Desde luego, que todos estos actos reprochables que van en contra de la vida, de las mismas minorías étnicas, deben ser condenados por el conjunto de la sociedad colombiana, el país debe rodear a sus líderes y el Estado tiene la responsabilidad de garantizarle sus vidas y protegerlos.

Mi mensaje solidario, para ella y su familia. Francia Márquez, representa toda la valentía de su raza, la firmeza de una región de valiosos ancestros, y el liderazgo insuperable de una mujer cuyo único propósito es dar la batalla para evitar la depredación ambiental en nuestro país.

Quienes promulgamos un mensaje de Paz con la Naturaleza solo tenemos gratitud, reconocimiento y admiración para ella: ¡Gracias Francia Márquez!