A escasos meses de que este actual Congreso termine su período constitucional, puedo presentarle al país un balance satisfactorio de nuestra labor legislativa.
En primer lugar tengo que señalar, que durante esta legislatura promovimos muchas iniciativas de corte social, que van a redundar sin lugar a dudas en una mejor calidad de vida para las poblaciones beneficiadas.
El listado de nuestro trabajo es largo, basta recordar importantes leyes que lideramos desde el Congreso de la República y grandes conquistas sociales, sobre todo para nuestro sur del país, para la gente que habita nuestro Macizo Colombiano.
Gracias a nuestros debates, hoy más de 200 mil familias de los departamentos de Nariño, Cauca, Putumayo y Caquetá gozan de subsidios al gas propano en cilindro, lo que les permite tener un alivio en su economía familiar y de paso contribuir con nuestro medio ambiente, pues ya no tendrán que seguir talando nuestros árboles para cocinar con leña y carbón, -nuestras campesinas ya no sufrirán más enfermedades respiratorias por cuenta de estar cocinando todo el día en medio del humo, eso ya quedó atrás.
Impulsaremos este mismo beneficio a más familias vulnerables de departamentos como el Valle del Cauca y Huila que también lo merecen por ser regiones que forman parte del gran Macizo Colombiano, fuente de vida y la principal fábrica de agua dulce del país.
La Ley 1876 de 2017 que crea el Sistema Nacional de Innovación Agropecuaria, es la ley agraria más revolucionaria que ha tenido el agro colombiano en los últimos 30 años.
A partir de esta ley de la cual fui coordinador ponente otros tiempos vendrán para nuestros campesinos, el campo colombiano será ahora más competitivo, nuestros jóvenes ya no saldrán de sus parcelas a engrosar los cinturones de miseria a las grandes ciudades, ahora ellos se quedarán cultivando el campo, porque esta ley va a permitir innovación, investigación, acceso a tecnología, asistencia técnica, extensión rural, sus productos ahora tendrán una mejor comercialización y podrán ser ofertados a precios justos, nuestros campesinos se volverán empresarios del campo y serán más competitivos, está ley será sin duda el renacer de nuestro campo mejorando de paso la calidad de vida de doce millones de campesinos que habitan la gran ruralidad colombiana.
Otro gran logro, la Ley 1845 de la cual soy autor, va a permitir que 450 mil viviendas gocen del servicio de energía eléctrica.
Es inaudito que hoy, dos millones 500 mil colombianos de nuestro Litoral Pacífico, de la Orinoquía y también de la Amazonía estén a oscuras, ¡ESO NO ES JUSTO¡ a partir de nuestra Ley, la calidad de vida de hombres y mujeres de estás grandes regiones va a mejorar sustancialmente.
Hemos dado la lucha por hablar por los que no tienen voz, por defender que se garanticen los derechos de nuestros animales, liderando grandes iniciativas como por ejemplo el proyecto de Ley encaminado a acabar las corridas de toros y otras prácticas de maltrato animal en nuestro país como las corralejas, las tientas y el rejoneo. También el proyecto que busca excluir a los menores de edad de asistir a prácticas que impliquen maltrato animal, proyectos que ya están siendo debatidos en el Congreso y esperamos que más temprano que tarde sean Ley de la República.
El país debe ir armonizado con el ritmo de los acontecimientos, suena incoherente hablar en estos momentos de Paz y seguir impulsando actos de violencia contra seres indefensos, es necesario estar en Paz con la Naturaleza, declararle la Paz al medio ambiente, al agua, a la vida y a los animales es parte de una sociedad moderna, democrática y civilizada.
El Medio Ambiente también ha esta en nuestra agenda, en tiempos en que el calentamiento global, el efecto invernadero y otros fenómenos que amenazan el planeta, tenemos que tomar conciencia colectiva, defendiendo nuestros ríos, cuencas, humedales, páramos, bosques, nuestra fauna y flora, en fin, a la naturaleza que es nuestra amiga.
Hemos promovido la expedición del documento CONPES del Macizo colombiano, próximo a ser firmado por el presidente de la República, donde se manifiesta el compromiso por cuidar y preservar la principal fuente de vida que produce el 70% del agua dulce de nuestro país, no podemos seguir maltratando a quien nos da la vida, por eso mi llamado es a protegerlo, como debemos proteger a nuestras especies en vía de extinción, como el oso andino o la danta de montaña, especies que también fueron objeto de debate en el Senado de la República donde enviamos un contundente mensaje al país sobre la necesidad de protegerlas.
En el Capitolio Nacional también hemos promovido sendos debates, lideramos la defensa de lo público y llevamos hasta el seno de la Comisión Quinta el debate sobre EMPOPASTO y sus posibles pretensiones privatizadoras por parte de un conglomerado español que lo único que buscaba era hacer negocios millonarios, sin importar el daño que pudiera causar a la sociedad Pastusa, por eso nos opusimos enérgicamente y hoy EMPOPASTO seguirá siendo patrimonio del pueblo pastuso y siempre estaremos defendiendo lo público, nada más sagrado que el patrimonio de un pueblo.
La grave problemática social ocasionada hace ya algunos meses por cuenta del desabastecimiento del gas propano en el sur del país, también tuvo su discusión en el Senado, hasta allá –la casa de la democracia- hicimos converger al Ministerio de Minas, a la Comisión Reguladora de Energía y Gas y hasta a ECOPETROL para que nos dieran soluciones definitivas y sí que sirvió nuestro debate, hoy el suministro esta normalizado y sobre todo garantizado.
En Guillermo García Realpe, siempre van a encontrar a un defensor de lo público a un aliado de las clases sociales más vulnerables, a un amigo de los campesinos, indígenas, afros, ambientalistas, animalistas y deportistas. Seguiremos alzando nuestra voz desde el Congreso de la República por todos ellos que son nuestra razón de ser.