TUMACO MERECE UN BUEN FUTURO

Opinión Por

Recientemente junto a varios senadores de la Comisión Primera, el Ministro del Interior Guillermo Rivera, los viceministros de Defensa y Agricultura, autoridades militares, representantes del Gobierno departamental de Nariño y varios alcaldes del litoral pacífico nariñense, sostuvimos un importante encuentro en Tumaco, con el fin de abordar las múltiples problemáticas que hoy afronta no sólo la perla del pacífico, sino también los municipios adyacentes que comparten las mismas necesidades sociales y económicas.

Se escucharon los planteamientos de los mandatarios locales, quienes reclamaron mayor presencia del Estado colombiano, para que a través del gobierno nacional se ejecuten programas y políticas públicas que permitan minimizar la brecha social que hoy  tiene esta región frente al resto del país.

En ese orden de ideas, se hizo una evaluación por parte de las entidades nacionales, regionales y locales sobre la temática de Tumaco, fundamentalmente, para seguir trabajando permanente e integralmente con enfoque territorial en este municipio, el segundo puerto en importancia sobre el Pacífico colombiano.

Tumaco, con una población que supera los 200 mil habitantes, es un municipio critico a nivel nacional y prácticamente de  lo que pase en Tumaco depende la Paz de Colombia, por lo tanto, salimos motivados de la sesión descentralizada de la Comisión Primera del Senado, pero, a seguir en la tarea de acompañar a sus alcaldes en las gestiones ante las entidades nacionales, para buscar gestiones que permitan la inversión de recursos significativos en todos los frentes.

Hay que reconocer que son muy complejos los problemas de Tumaco, entre ellos, la coca, el narcotráfico, la marginalidad, la pobreza, la presencia de bandas criminales, la debilidad institucional y la falta de oportunidades de ingreso para la gente, son factores que alimentan un conflicto social y que por ende no se deben ocultar, sino enfrentar con todo el apoyo del Gobierno.

La coca llegó al litoral pacífico nariñense a finales de la década de los noventa y con ella llegó la violencia y con la coca llegaron los actores armados, entonces acabar con la coca debe ser una prioridad para el Gobierno, pero acabar con esto, no significa desconocer el origen en las  precariedades socioeconómicas que se viven en esta zona del país para que este tipo de cultivos crecieran a la manera como han crecido, pues se estima que de las 30 mil hectáreas que hoy existen en Nariño, 18 mil están en territorio tumaqueño.

La inseguridad del puerto, es otro tema que preocupa a la ciudadanía, según cifras oficiales, en lo corrido del año ya van 86 homicidios frente a 54 ocurridos durante el 2016, hay 14 policías por estación, por ejemplo, municipios como Barbacoas, con 36 mil habitantes no llega  a veinte uniformados policiales.

Por eso, para contrarrestar este flagelo, el Ministro del Interior, anunció que ya se ha avanzado en la creación de un cuerpo élite para perseguir el crimen organizado, se va desarrollar un plan piloto de ese esfuerzo combinado entre la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación, en dos municipios de Colombia, uno Buenaventura y el otro Tumaco.

También se ha anunciado que ya está en marcha el plan de sustitución de cultivos, que según cálculos, tendría un costo de $720 mil millones. Así mismo, el proyecto de reforma al sistema general de regalías está a un debate de ser Ley de la República y permitirá invertir cerca de un billón y medio en vías terciarias, y a Tumaco y a los demás municipios les va a corresponder una proporción muy importante para ejecutar recursos en esta materia.

Las circunscripciones de Paz, en zonas con múltiples fenómenos como cultivos ilícitos, pobreza extrema, aislamiento por la ausencia de vías de comunicación, debilidad institucional y una serie de problemas más, va a permitir que estas comunidades tengan un Representante más a la Cámara, para que sea su vocero y el encargado de velar para que las inversiones del Estado lleguen a los territorios históricamente excluidos.

Por último el Plan Todos Somos Pacífico, con 400 millones de dólares se debe convertir en el vehículo para que todas estas inversiones sociales lleguen gradualmente no sólo a Tumaco, sino también a Buenaventura, al resto del litoral  pacífico y desde luego a los municipios de López de Micay, Santa Bárbara de Timbiquí y Guapi de la costa Pacífica caucana, los cuales ocupan el 28% del área total del departamento del Cauca.

El futuro en el corto y mediano plazo, será y debe ser mejor, el posconflicto tiene enormes retos por delante y esperamos que regiones olvidadas como estás tengan un mejor porvenir y en este propósito seremos un aliado incondicional.