Después de tantos escándalos como los que hemos venido teniendo con los candidatos al congreso, a la presidencia y también con funcionarios públicos, es hora de renovar el congreso y darle castigo político a los corruptos.
En las listas al congreso encontramos caras nuevas y refrescantes, pero debemos mirar quienes son, cuales son los antecedentes de estos candidatos y por supuesto sus propuestas-.
Desafortunadamente en el mundo hay pocos líderes y los que hay están en vías de extinción. Entre las caras nuevas hay una que me llama la atención y es la de Ana María Lleras Figueroa que en este caso en particular aunque es la nieta del expresidente Carlos Lleras Restrepo es una mujer con un bagaje profesional importante y sobre todo que se caracteriza por su transparencia, honestidad y profesionalismo a toda prueba, por lo cual reúne las condiciones para ser una buena candidata a la Cámara de representantes por el partido Dignidad de la coalición de la Esperanza.
Ana María Lleras busca llegar al congreso para defender a la industria nacional y el ecosistema de la moda, el impulso del mercado interno, generación de empleo y la modernización de la industria, son sus principales banderas.
Entre las propuestas que Ana María tiene están: 1) Empresa digna: 2) Trabajo digno: 3) Modernización industrial, que son temas fundamentales para el desarrollo del país.
Ana María siempre ha liderado por el progreso digno de Colombia desde el empresariado. En Proexport trabajó para que las empresas colombianas comercializaran sus mercancías en el exterior, mejorando la calidad de los productos y diversificando el mercado. Posteriormente, desde la Federación Nacional de Cafeteros, diseñó e implementó la política con enfoque de género en el sector agroindustrial más grande de Colombia.
Personas como ella le devuelven a los colombianos la esperanza de que todo no está perdido y que aún hay personas con el talante, la capacidad, los valores y el compromiso que se requieren para que nos representen en la Cámara por Bogotá de manera digna.
La invitación es que le digamos NO a la venta y compra de votos que además de ser un delito, es una manera de hacernos a nosotros mismos hara-kiri y de ser cómplices de esta transgresión que aumenta la corrupción con la que vacian el erario público que es de todos los colombianos, y con el que se debe hacer inversión social.
Reflexionemos. Cambiemos el rumbo de la política y encarrilemos al país. Díganos NO a todos aquellos candidatos al congreso y a la presidencia que están involucrados en escándalos de presuntos delitos. Debemos salir del adormecimiento en el que la nación colombiana se encuentra. Es hora de despertar, de tomar las banderas democráticas y de escoger al mejor candidato.
Recordemos que hay que votar por ideas y estrategias. Elijamos candidatos como la Lleras en Bogotá. Estoy segura que en otras circunscripciones encontraremos candidatos similares a Ana María Lleras.