Claudia López; del Parlamento al Gobierno

Opinión Por

1 año 3 meses han transcurrido del gobierno de la primera alcaldesa de Bogotá, mujer activa, polémica, inteligente y trabajadora, “hecha a pulso”, como ella se suele describir.

El país la ha visto desde sus épocas de lideresa estudiantil en el movimiento de la séptima papeleta, yo desde sus denuncias en medios de comunicación contra la corrupción y el paramilitarismo junto a su amigo y próximo candidato a Senado Ariel Avila, entre otros buenos y destacados periodistas investigadores, tuvo una buena luna de miel con el electorado capitalino, la cual, ya se acabó según los datos de las ultimas encuestas donde su popularidad ha disminuido hasta el 44%, pero estoy seguro que èste margen aún le da capacidad de maniobra y gobierno, todos sabemos que no han sido tiempos fáciles y Bogotá es una plaza compleja en tiempos corrientes, mucho más en estas extraordinarias épocas de pandemia, sin embargo, observo que esa gobernabilidad se puede resquebrajar por varios factores y con ello, caeríamos en una peor situación, lo que me motiva a escribir estas letras, pues vivo en esta ciudad y deseo lo mejor para la misma, pero también espero que entre líneas llegue el mensaje, me explicó; en primera medida por causa de la controversia nacional en torno a la reforma tributaria, el Partido Verde junto al Polo Demócratico, quienes sumados hacen de la bancada de gobierno una bancada mayoritaria en el concejo de la ciudad, han planteado públicamente su rechazo a la reforma tributaria eufemísticamente llamada “Ley de Solidaridad Sostenible”, sin embargo, la Senadora Angelica Lozano, esposa de la mandataria capitalina, y la representante Juanita Gobertus, gran alfil verde y próxima candidata al Senado, no firmaron la solicitud por la cual su partido pide el retiro de la reforma tributaria y la misma alcaldesa ha señalado su beneplacito con que dicha reforma generaría ingresos adicionales a la ciudad para cofinanciar los déficit cada vez mayores del sistema de transporte público, que sucederá entonces aquí? concejales del @PoloDemocratico como @CarlosCarrilloA, o @CelioNievesH del sector de @fecode que dirán, si o no a la reforma? y si dicen #NoaLaReforma en sí mismo no estarían diciendo no a la alcaldesa?, Ni qué decir de los concejales verdes que en sus cuentas de tuiter etiquetan el de moda y consecuente #NoaLaReforma como el @ElJuliSastoque o @maferojas entre otros, asì mismo el concejal ex polo, ahora @dignidad_col @mjsarmoentoa, entonces me pregunto, esto no afectará la gobernabilidad de la mandataria, como se manejará este doble discurso en medio de un proceso electoral candente?

En segunda instancia, tenemos que las asignaciones presupuestales por excedentes financieros que se quedaron en ceros para las localidades como Teusaquillo, Puente Aranda, Antonio Nariño, Fontibón para poner ejemplo de localidades bien marcadas de verde en las últimas elecciones y las localidades de Engativá, Kennedy o La Candelaria, más diversas y liberales, generará indiscutiblemente un fuerte malestar, máxime cuando ya se empieza a conocer que dichos recursos económicos que sirven para satisfacer las necesidades básicas insatisfechas (I.N.B.I.) de la población, fueron asignados a un nuevo programa llamado “jóvenes en paz”, el cual consiste en generar un bono o subvención económica a jóvenes que pueden estar en paro independiente o que pertenecen a colectivos o incluso pandillas, èste “Bono” de casi un salario mínimo, se les otorga para que no tengan la necesidad de acudir a la delincuencia o incluso, desistan de ella quienes ya están, sin embargo, en estas localidades por cuenta de esta política, saldrán perjudicadas las poblaciones que perdieron sus empleos, las que están en condición de discapacidad, los comerciantes, emprendedores y emprendedoras, artesanos, vendedoras informales en fin, todos aquellos a los que no se les ha brindado una debida atención en medio de esta pandemia, generando un peligroso mensaje a la comunidad, consistente en que es mejor representar un peligro para la sociedad en algunos casos, o no ser emprendedor, o no generar empleo, por qué así “me dan un bono y/o una ayuda económica”, esto acaso no generará una molestia en las comunidades, no generará un rechazo social y político, que a su vez se escalará a los concejales y a sus representantes a la cámara que inician campaña el 2022? Cómo asumir este costo político, lo harán los partidos de gobierno distrital @PartidoVerdeCol , @PoloDemocratico y @Dignidad_Col?

Finalmente, el próximo miércoles 28 de abril se ha convocado una enorme marcha en contra “Del Paquetazo de Duque”, marcha más que justificada y necesaria, sin embargo, en medio de una pandemia con su tercer y más agresivo pico que solo ayer 24 de abril cobró la vida de 440 personas, exige que la mandataria deba tomar una decisión clara, o permite la marcha y en ese caso millones cuestionarán el hecho que se ha insistido en cierres del comercio, Iglesias, cines, bares entre otros para disminuir el contagio ó no permitir dicha marcha con la consecuencia de reforzar la imagen que tiene en muchos sectores en donde piensan que le estaría haciendo el juego a Duque por cuanto el gobierno distrital se beneficiaría de dicha reforma tributaria contra la cual marcharemos miles, esto se constituye en un verdadero dilema para la alcaldesa, pues haga lo que haga, habrá consecuencias políticas.

Por estas tres razones, es que se denota la diferencia entre ser parlamentaria y ser gobernante, parla-mentarío es quien parla, habla, debate en un estamento como el congreso, la asamblea, el concejo o la JAL, gobernar,  es “elegir“  según Pierre Mendes-France, o “descontentar” según Anatole France, amanecerá y veremos.