La venta de Ecopetrol

Opinión Por

La semana pasada el presidente de FASECOLDA (federación de aseguradoras de Colombia) Jorge Humberto Botero realizó una intrépida y sorpresiva propuesta al Concejo Nacional Gremial de vender la participación que el Gobierno Nacional tiene en la empresa pública Ecopetrol, propuesta que debería ser primero aceptada por todos los gremios antes de hacerla formalmente al Gobierno Nacional.

La propuesta a generado distintas reacciones una de apoyo desde la ANIF, el gremio asegurador, entre otros gremios y respaldo político de los alfiles del futuro gobierno Duque. Pero también tuvo contradictores por los riesgos e implicaciones que genera, entre sus detractores esta Bruce Mac Master presidente de la ANDI, entre otros gremios y empresarios que ven una acción muy riesgosa fiscalmente eliminar los ingresos del gobierno provenientes de las utilidades de Ecopetrol. Pero también fue rechazada por la USO (Unión Sindical Obrera de la industria petrolera) y la CUT (Central Unitaria de Trabajadores de Colombia) ambas consideran que la propuesta es irresponsable económicamente y descontextualizada a realidad social de Colombia.

La propuesta de FASECOLDA se vasa en 3 ideas principales las cuales son: 1) La necesidad de eliminar la dependencia de los ingresos fiscales a las rentas petroleras y por ende reducir el riesgo al estar ligadas al precio del petróleo, 2) La necesidad de desarrollo económico implica generar inversiones en activos que mejoren la competitividad (infraestructura) y 3) El sector de energía de hidrocarburos no es un sector estratégico a largo plazo.

Es bajo estos tres preceptos que se plantea la venta de la petrolera, la cual por ser una suma tan cuantiosa se propone que se genere un fondo donde se deposite el valor de la venta y el gobierno retire parcialmente estos recursos según el cronograma de inversión, propuesta que aparentemente posa de razonable aunque tiene varios problemas, el primero y más evidente es que sin los ingresos de Ecopetrol (dividendos) que serían lo que dejaría de percibir el estado se incrementaría el déficit fiscal a menos que se realice  una reforma tributaria que incremente los impuestos para compensar lo ingresos perdidos de Ecopetrol o que los recursos del fondo se utilicen para financiar el déficit fiscal; si ninguno de estos casos ocurre, lo que queda es el incremento de la deuda pública para tapar el nuevo hueco fiscal.

En el fondo la propuesta de FASECOLDA se plantea una restructuración de activos del estado, de pasar de un activo físico a uno financiero y gradualmente a infraestructura. El problema es que nada garantiza que la rentabilidad del fondo sea igual a la que genera Ecopetrol, al contrario, puede ser menor o negativa y depende de la composición de activos del fondo y su nivel de riesgo, este escenario se puede estar gastando los recursos del fondo en palear el gasto de funcionamiento o lo que es lo mismo: Se vendió la empresa para mecatearnos la plata.

Además es falso que vendiendo Ecopetrol se solucione o se elimine la dependencia de los ingresos del estado, se reduce pero no se elimina, porqué aproximadamente el 50% de los ingresos que Ecopetrol le da estado colombiano son por concepto de impuestos y regalías que van a seguir existiendo, junto con el resto de impuesto y regalías que generan todas las demás empresas del sector extractivo, vender Ecopetrol no cambia esta realidad pues es un tema estructural de la economía colombiana y que solo se supera incentivando e invirtiendo en otros sectores principalmente industriales para diversificar nuestra canasta de bienes exportados.

Adicionalmente del problema fiscal que genera la venta de la empresa pública más grande del país, vale la pena preguntarse si las inversiones en infraestructura solo se pueden financiar con la enajenación de activos, y la respuesta es no, es más se puede financiar este gasto con la emisión de deuda pública, apostando a que el crecimiento económico generado de estas inversiones mejoren los ingresos del estado y por ende creando los ingresos para pagar por estas deudas y al final del tiempo cuando se paguen las deudas se tiene la infraestructura construida y las empresas del estado.

Y por último, afirmar que el sector de hidrocarburos no es un sector estratégico de Colombia implica, primero, o desconocer la realidad actual de dependencia económica hacia este sector, o suponer que el cambio de tecnología va a ser súbitamente rápido hacia las energías renovables, lo que permitiría eliminar el motor de combustión y por ende eliminar la demanda de combustibles, o segundo, se tiene una solución técnica y económicamente viable para los derivados del petróleo o una fuente de energía que permita dar calefacción a los hogares de la región del mundo que tiene estaciones de forma económica y masiva.

Pero lo cierto es que ese cambio técnico es lento y mucha de la tecnología que puede sustituir el petróleo no es económicamente viable aún, es decir, los autos eléctricos siguen siendo costosos y aunque hay grandes programas de investigación para desarrollar un auto eléctrico barato accesible para todos se estima que tomará como 30 años masificarlo o más, el petróleo sintético y sus derivados con la tecnología que de ella se desprende está en pañales, y faltan años de investigación para ser viables incluso más que la masificación del auto eléctrico, y por último el problema de la calefacción barata para las regiones que padecen estaciones y dependen del crudo es aún más compleja.

Y si lo anterior no convence de lo estratégico de este sector, falta el tema de seguridad nacional, pues hoy en día y en un futuro cercano, todo el equipo militar y logístico del ejército (de todos los ejércitos del mundo) se mueve y dependen del petróleo para moverse y funcionar, razón estratégica y fundamental de la razón por la que las naciones almacenan crudo y combustibles. Estas son las razones de porque el sector petrolero-energético es tan estratégico sin contar de que es el insumo fundamental de sectores tan importantes como el transporte entre otros, y es una realidad que no va a cambiar en los próximos 30 o 40 años o más antes de eliminar la dependencia total a los combustibles fósiles.

Ahora bien, esta propuesta ya quedó en el ambiente y en los próximos cuatro años la veremos resurgir, revivir y transformase en el debate, mutando, tomando formas distintas y argumentos para justificar lo injustificable, vender Ecopetrol puede ser uno de los errores económicos mas grandes que el nuevo gobierno puede cometer y que tendrá consecuencias por un largo tiempo sobre la economía colombiana.

Economista y Magíster en Economía de la Universidad Externado de Colombia. Fue docente de la Universidad Externado, Ex-analista de deuda del Ministerio de Hacienda. Asesor y consultor en modelación macroeconómica.