El autogolpe del 5 de abril de 1992 va dar origen a la ley mayor, la Constitución Política del Perú, capitalista y neoliberal, que tutela a más de 31 millones de habitantes en Costa, Sierra y Selva hasta la fecha 2022, resto de días no sabemos.
Empezando por el Artículo 59° sobre Economía. “El Estado estimula la creación de riqueza y garantiza la libertad de trabajo y la libertad de empresa, comercio e industria. El ejercicio de estas libertades no debe ser lesivo a la moral, ni a la salud, ni a la seguridad públicas. “El Estado brinda oportunidades de superación a los sectores que sufren cualquier desigualdad; en tal sentido, promueve las pequeñas empresas en todas sus modalidades”. En pocas palabras el Estado autoriza para que el territorio se convierta en una especie de campo en conflicto activo perenne donde debe de ganar el más fuerte, asegurando así el triunfo del más fuerte, mafioso, y corrupto. Se vive en un territorio sin ley para los pobres y con ley para los ricos.
La Costa fue elegida como campo cultural preferido para el desenvolvimiento de la locura de la modernidad por su urbanidad y la explotación laboral barata. Es el campo del agro negocio en la actualidad, — Cuartel del Capitalismo. Como dice la Socióloga Ana Clara Ribeiro (2012), sería el campo donde todo lo sólido se tiene que desmanchar, o querer transformar. Pero no todo se puede desmanchar, o transformar, no solo existen máquinas, cemento—existe vida humana. sobre la Zona Andina Indígena de la Sierra, todavía se muestra rebelde a ser al 100 % conquistada, pero no está libre a todo tipo de programas neoliberales en lo contemporáneo como la minería.
Dar una mirada al Artículo 60°. “El Estado reconoce el pluralismo económico. La economía nacional se sustenta en la coexistencia de diversas formas de propiedad y de empresa”. Este punto solo lo deben de creer los empresarios y las clases poderosas que desde los 1990 empezaron a controlar el juego político, económico y judicial. En todo caso el Estado peruano solo se comporta como un instrumento de legalidad y formalidad del más fuerte.
La Región de la Selva, es en todo caso otro campo perfecto que, a pesar de su rebeldía de la geografía, la mata amazónica que la protege libra una conquista perenne por el capitalismo Neo extractivo de recursos naturales contemporáneo y el Agronegocio. Según el Instituto nacional de Estadística e Informática (INEI 2017), aquí viven más “de 1 mil 786 comunidades étnicas indígenas y las 13 familias lingüísticas como los Arahuaca, Cahuapana, Harakmbut, Huitoto, Jibaro, Pano, Peba-Yagua, quechua, Tacana, Tucano, Tupi-Guaraní, Zaparo, y otros pueblos sin contacto.
Continuando con el Artículo 61° menciona: “El Estado facilita y vigila la libre competencia. Combate toda práctica que la limite y el abuso de posiciones dominantes o monopólicas. Ninguna ley ni concertación puede autorizar ni establecer monopolios”. De igual forma este artículo sólo favorece a los capitales extranjeros primero, si los monopolios lo deciden todo. Aquí se encuentra dibujado el gran salto al progreso, llamado por los politólogos, y sociólogos críticos de fantasía o mera ilusión. El Estado entonces funciona como un árbitro que juega en contra de sus intereses nacionales y sí a favor del poder de las grandes empresas dado que su matriz es capitalista, (leer Artículo 59 con atención).
Sobre el tema ambiental tenemos el Artículo 66°. “Los recursos naturales, renovables y no renovables, son patrimonio de la Nación. El Estado es soberano en su aprovechamiento”. “Por ley orgánica se fijan las condiciones de su utilización y de su otorgamiento a particulares. La concesión otorga a su titular un derecho real, sujeto a dicha norma legal”. Este artículo da potestad al Estado y sus inversionistas hacer y deshacer o por voluntad o por la fuerza tomas mano de las riquezas del país, por ello que parte de los conflictos socio ambientales vienen de por aquí. Un caso reciente fue el derrame de petróleo en Lima, ¿qué se hizo? —, canastas regalaba la empresa Repsol como amonestación.
Pueden darle una mirada al “Artículo 67°. El Estado determina la política nacional del ambiente. Promueve el uso sostenible de sus recursos naturales”. También al “Artículo 68°. El Estado está obligado a promover la conservación de la diversidad biológica y de las áreas naturales protegidas. Y como no al “Artículo 69°. El Estado promueve el desarrollo sostenible de la Amazonía con una legislación adecuada”.
Lo que está en juego sí hay Referéndum para cambiar la Constitución Política y gana el Sí, es nada menos que poner en vilo a un sistema económico, jurídico, político y democrático colonialista criollo liderado por las familias poderosas del país, medios de comunicación, políticos corruptos, monopolios económicos, y todo socio neoliberal a un nuevo juego constitucional
