La (res) política, para Steve Stein, es la forma de repartirse, o hacer uso del poder por los gobiernos y gobernantes y serve como un paradigma de conducta ética y moral que se aplica, por ejemplo, al presidente, sus compadres, familiares, amigos, ahijados, y toda gente de confianza. La doxa de hoy es repensar el abuso del poder, por el cual tomaremos de caso al Perú y las Vacunas Vip.
El individualismo, el egoísmo y la ignorancia en nuestra sociedad periférica son una capa dura de demoler en la columna vertebral de las reglas morales y éticas de la sociedad. En el caso de las vacunas vip, el ex presidente peruano Martin Vizcarra, su familia y amigos aprovecharon de su cargo para vacunarse por el Covid-19 a las escondidas del pueblo moribundo. Argentina también estaría en este dilema de sálvese quien pueda. Tal hecho debe ser puesto en las órdenes del día, como alerta para la reflexión de otros países vecinos y llamar la atención para los conflictos entre lo público y el privado en la administración pública.
Parafraseando a Max Weber hay dos tipos de políticos, los que viven de la política y los que hacen la política. Al parecer, hay países en América Latina optaron por la escuela de vivir de la política y no hacer política. Nos preguntamos ¿por qué tenemos políticos corruptos, y por qué se los elije? Por, infelicidad nuestra aún somos unos niños cuanto a la profundidad de nuestra conciencia crítica. Para comprender la idea de la (res) política y sus sentidos, tomemos la historia de las pulgas y los perros que las cargan en la política. Las pulgas son aquellos arribistas políticos, populistas que aparecen de tiempos en tiempos (las elecciones), y van de partido en partidos (los perros) con el solo fin de obtener un poquito de sangre para vivir holgazanamente chupando la sangre del pueblo que los elije. Si el pueblo necesita de representación, pero ¿quién? Perú pasa por una grave crisis en razón de estos hechos. Gustemos o no, somos peces de agua salada en una poza artificial. La crisis de representatividad se hace una discapacidad administrativa y, más, un colapso de la ética y la moral en la política.
Decía Mariátegui que la higiene mental de nuestro pueblo empieza en las primeras escuelas de sumisión, en la quietud, y en las familias aristocráticas en todos los países. En el caso peruano, se llega sin una luz o un rumbo seguro que deje salir de las incertezas tristes y acongojadas, y de la miseria y pobreza que tienen se enfrentado mucho más por los lazos de solidaridad y complementariedad del pueblo que por políticas públicas con capacidad resolutiva. Como lo diría Maquiavelo, de no olvidar que el juego de la política es como un duelo entre lobos, zorros y leones en cada Estado.
¿QUÉ HACER PARA AYUDAR A NUESTRA SOCIEDAD A REFLEXIONAR LA RES POLÍTICA Y SUS ACTORES?
Conciencia crítica profunda. En el contexto que tenemos es urgente empezar a (re) pensar lo que se hace un valor, cuáles son nuestras escojas y porque hay sido así. Hay que organizarse políticamente no solo como todo, pero desde las pequeñas partes, porque no podemos a cada año electoral poner caballos de troya en los gobiernos. Hay que construir nuevos paradigmas críticos para el sentido del voto en las urnas, y empezar a dar castigo al ideario colonialista de la sumisión y irresponsabilidad de los políticos con la población. La elección es un juego político, pero al salir vencedor el gobierno es para y por todos, no solo para los amigos del rey.
Conciencia del voto. Si se sigue mirando asistir a las urnas solo para favorecer a mi amigo y mi compadre o quien me dio un mes de trabajo, cuidado se sigue reproduciendo la alienación y sumisión. Hay que hacer una ruptura, y no ser legitimadores de organizaciones que solo buscan su interés. Vamos ser responsables con nuestras acciones en la vida política. No ir a votar solo por evitar la multa. No ir a votar por votar.
No ser ingenuos. El poder de la neoliberalización, como instrumento que garantiza a los intereses del capitalismo en nuestros países deben ser contados y analizados con seriedad. Hay que tener control sobre los procesos, la regulación y contener el avance de regímenes de opresión para los Estados periféricos como es América Latina. Hay que despertar, la política no es neutra, hay interés por detrás del financiamiento de los partidos y las alianzas políticas. ¿En estos tempos de pandemia quién se viene enriqueciendo?
«La idea de que el vivo vive del sonso y el sonso de su trabajo, es un ideario a rechazar de nuestro entorno social».