EL TERRIBLE SECUESTRO DE GLORIA CECILIA NARVÁEZ

Editorial Por

A inicios de febrero de 2017 un grupo de hombres secuestró a Sor Gloria Cecilia Narváez en Malí, un país africano de los tantos que sufren el azote de fuerzas extremistas.

Solo hasta Julio de este año se tuvo una prueba de supervivencia de la religiosa. Ahora se sabe que está viva, pero también se sabe que su drama parece lejos de terminar.

A diferencia de otras naciones la Embajada para un colombiano en ese país más cercana es la de Ghana, Claudia Turbay su Embajadora, advirtió a los medios colombianos, que no solo es la primera vez que un nacional sufre este tipo de secuestro, sino que además podría tardar años antes de ocurrir su liberación.

¿Qué haría usted en caso de vivir este tipo de secuestro? Estaría en un país lejano, en una lengua desconocida, y acusado de “despojar a los musulmanes de Malí de sus creencias y reemplazarlas por falsedades”, como han manifestado los secuestradores en la última prueba de vida.

Narváez no es un colombiana acaudalada, ni su familia, ni su profesión. El Presidente de Francia Emmanuel Macron ha hecho un llamado para llevar más fuerzas de ese país a Malí para enfrentar el terrorismo, pero poco o nada a dicho de liberar a estos secuestrados como su prioridad.

Los colombianos tenemos un deber de exigir al Estado su atención frente a estos hechos, y no solo esperar a que el secuestro dure años o le cueste la vida a esta compatriota, que la diplomacia no sea también “para los de ruana”.