La encrucijada de la Corte Suprema de Justicia

Análisis Por

Hoy la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia tiene una cita, en la que buscará la elección de magistrados (tiene 7 vacantes), y de Fiscal General.

Aunque no se cree que la elección de Fiscal se destrabe hoy, preocupa más la situación de quórum de la Corte para esa y otras decisiones a futuro, todo, porque la Corte luego de la elección de los Magistrados de Instrucción, sufrió un difícil retraso en la elección de nuevos magistrados, quedando hoy con 16 miembros, justo el número para decidir la elección de reemplazos y elegir nuevo Fiscal General, así que necesita que las decisiones sean por unanimidad (un escenario que ya se había planteado en Ola Política).

La situación es tensa, pues el 27 de febrero termina el periodo del magistrado Ariel Salazar de la Sala Civil, quien precisamente envió una carta al presidente de ese alto tribunal para criticar la llegada de varios posibles magistrados y defender las ocasiones en las que ha recurrido al voto en blanco para evitar llenar esa vacante, para el magistrado Salazar, si la Corte pierde su quórum decisorio no será su responsabilidad, pues dijo que varios de dichos magistrados llegan para hacer “turismo judicial”.

Tradicionalmente los magistrados son reemplazados por cercanos o aquellos que tienen el visto bueno de sus antecesores, así llegan magistrados auxiliares, o reconocidos abogados que son cercanos a los actuales, pero los choques, en especial de la Sala Penal con la Sala Civil, en los últimos años, han terminado por desbaratar la elección de los nuevos magistrados.

En un juego donde hay tantos factores, como el número de magistrados que son de la Universidad Libre, o si son de su región, o si son cercanos o no al actual gobierno, tienen contra las cuerdas a varios candidatos y pone en peligro la elección de los magistrados.

El caso Morales y la unanimidad

En 2010 la elección de Vivian Morales como Fiscal General, estuvo marcada por la falta de quórum, lo que hizo que la Corte realizará una interpretación diferente a su reglamento para elegir a Morales como Fiscal y llenar cinco vacantes, luego la elección de la Fiscal se cayó y sentó un precedente que juega hoy en contra de quien pueda ser elegido.

Con la caída de la entonces Fiscal, quedó claro que se requieren 16 votos, sin importar el número de magistrados activos en la Corte, lo que significa que la decisión requiere de unanimidad, algo que sería más sencillo si eligen a nuevos magistrados.

Además, está en juego la elección de Aroldo Quiroz (actual vicepresidente), como presidente, y llenar al menos una vacante, una de la Sala Civil (luego de la renuncia de la actual Ministra de Justicia, Margarita Cabello), tres de la Sala Laboral (luego de la salida de Mauricio Burgos, Luis Gabriel Miranda, y Rigoberto Echeverri), y tres de la Sala Penal (las de José Luis Barceló, Fernando Castro, y Luis Guillermo Salazar).

Los escenarios podrían ser:

  1. Si logran elegir al menos un magistrado, tendrían más tiempo para elegir al Fiscal General sin necesitar al menos de un voto.
  2. Si eligen más de un magistrado, podrían antes de la salida del magistrado Ariel Salazar, tomar la decisión sin necesitar de más de un voto.
  3. No elegir magistrados hasta el 27 de febrero, lo que dejaría a la Corte sin quórum para tomar ninguna de las dos decisiones.

La última vez que la Corte vivió una situación en la que se quedaba sin quórum, fue precisamente en el holocausto del Palacio de Justicia, lo que obligó al presidente Belisario Betancur, a expedir un decreto para que el quórum fuera 8 y no 16, por supuesto, tuvo que decretar antes de ello un estado de conmoción interior. Esa salida, no sólo le daría más poder al presidente frente a la elección, también es incierta, pues tendría que hacerse bajo el marco normativo posterior a la Constitución de 1991, y no es claro que sea viable.