Leonardo Puentes, es artista, compositor y docente universitario, pero además de todo esto, es uno de los promotores de la revocatoria al Alcalde Enrique Peñalosa a través del Comité promotor “Revoquemos a Peñalosa”, conocido además por tomar la palabra sin permiso en el Cabildo abierto contra la venta de la ETB.
Leonardo es una de las personas detrás de la revocatoria del alcalde con mayor conocimiento sobre la posibilidad de llegar a las urnas, y lograr que por primera vez este mecanismo pueda revocar a un alcalde en Colombia, especialmente en Bogotá. Sobre su relación con Petro, los desafíos de revocar al alcalde, las bajas probabilidades que tiene su Comité a diferencia de “Unidos revocamos” y la coherencia o incoherencia de su convocatoria, habló con nuestro periodista Daniel Alejandro López para Ola Política.
O.L. ¿Qué pasó con su Comité de revocatoria?
L.P. Hicimos un ejercicio muy organizado desde noviembre 2015, con una tarea pedagógica, hablando con las personas, pero si hubiéramos empezado como “Unidos revocamos” el 2 de enero, la ciudadanía no tendría una opinión formada sobre el tema y nada habría pasado. Ellos llegaron a una ciudad preparada y además tenían más manos y más recursos. Por eso tienen más firmas.
O.L. Una de las grandes acusaciones de los defensores de Peñalosa, es que ustedes empezaron desde antes de que se posesionara a mover la revocatoria, ¿Por qué lo hacen desde antes de que siquiera gobernara?
L.P. Nosotros sabíamos que Peñalosa no vendría a gobernar de manera diferente a como lo hizo en 1998, si yo hubiera tenido la posibilidad de revocarlo en ese año lo habría hecho?, nosotros dijimos sí, entonces en este escenario lo habría hecho también?, la respuesta es sí.
Por la manera como se formuló el sistema nefasto que se llama transmilenio, por la manera como se llenó de bolardos Bogotá, con las pérdidas billonarias de las losas que tenemos que pagar los Bogotanos, pero ojo!, la revocatoria no arrancó en noviembre de 2016, arrancó una estrategia pedagógica, la revocatoria arrancó este año, que iniciamos desde las redes y las calles a hacer pedagogía desde antes, es otra cosa.
O.L. ¿Qué diferencias hay entre ustedes y los demás Comités de revocatoria?
L.P. Además de que nosotros arrancamos más temprano. “Unidos revocamos” está conformado por organizaciones políticas y sindicales que todas pertenecen a la izquierda tradicional de Bogotá, en cambio “Revoquemos a Peñalosa” está conformado por ciudadanos independientes, apolíticos, petristas arrepentidos, progresistas, liberales, conservadores, del Partido de la U, o en su mayoría gente sin partidos.
Si tuviéramos un Comité con las firmas y la exposición de motivos correcta, fijo iríamos a revocatoria
O.L. Ante esta situación ¿Usted ve posible que se realice la revocatoria de Peñalosa? y ¿Por qué?.
L.P. Yo creo que sí es posible si se cumplen los requisitos legales, pero creo que en este contexto tenemos un Comité (Unidos revocamos) que ya completó aproximadamente 470 mil firmas válidas, en este momento se están venciendo los días hábiles que tiene la defensa de Peñalosa para verificar esas firmas.
Desafortunadamente aunque tengan las firmas tienen un problema en la exposición de motivos, ellos alegaron “insatisfacción general de la ciudadanía”, usted puede leer una gran exposición demagógica donde se pone la insatisfacción general de la ciudadanía a través de muchos temas.
Nosotros de acuerdo a la Ley y a las diferentes sentencias, hemos obrado muy coherentemente pues exponemos “Incumplimiento del programa de gobierno” en 11 puntos claros que entregamos en 4 hojas a la registraduría. Y eso me aboca a decir que todo el problema jurídico que se ha tenido este año sobre el tema de exposición de motivos, con el abogado del alcalde, el Doctor Sierra Porto, Azul Bogotá y todos los peñalosistas que empezaron a mirar y revisar que sucedía, hizo que germinara en que el Consejo Nacional Electoral la idea de revisar la exposición de motivos, y definitivamente usted no puede revocar a un Alcalde que hace bien las cosas, solo porque caiga mal, debe tener argumentos de peso, reales, ahí la ley tiene algunos vacíos, por eso nos remitimos en dejarlo lo más claro posible en nuestro texto.
Si tuviéramos un Comité con las firmas y la exposición de motivos correcta, fijo iríamos a revocatoria, pero eso ahora no lo puedo asegurar.
O.L. ¿Usted viene de ser un funcionario de la Alcaldía de Gustavo Petro?
L.P. Yo hice parte de la administración, pero no de la administración de Gustavo Petro. Yo trabajé en Ideartes en el año 2011, usted puede buscar el contrato, es público, donde dice que yo acabé mi contrato en diciembre de ese año, y la administración Petro arrancó días después.
Pero aún cuando yo haya trabajado en la administración Petro o no, eso no me hace petrista. Mucha gente del distrito no es petrista o tiene otras corrientes políticas.
O.L. Pero cuando a Petro se le realizó su intento de revocatoria ¿No lideró usted “Petro no se va”?.
L.P. Yo no soy petrista, comparto mucha de la línea de Petro sí, pero no soy petrista. Yo a finales de 2013 estaba planeando salir del país, y en esos últimos días de diciembre el Procurador General tomó la decisión de destituir al Alcalde, y yo al igual que casi 50 mil personas indignadas, decidimos ir esa noche a la Plaza de Bolívar, esto me generó una indignación grande, el hecho de que un Alcalde fuera quitado con una venganza política, y es esas venganzas políticas las que está padeciendo principalmente hoy Petro, pero decir eso no me hace petrista, me hace una persona que comparte cosas de esa administración y otras no las comparte.
Cancele mi viaje, y el señor Petro dijo que invitaba a la ciudadanía a que se organizara libremente en temas diferentes, meses antes ya se venía organizando su revocatoria, y me quede para defender al Alcalde, pero incluso nosotros cuando diseñamos la estrategia, estábamos convencidos de ir a revocatoria, porque la habíamos diseñado tan bien, que sabíamos que la íbamos a ganar.
O.L. ¿No sería entonces incoherente usar ese mismo mecanismo de revocatoria contra el Alcalde Enrique Peñalosa?
L.P. No, es que es una posición política, y ese pensamiento no me hace petrista, pero mientras con Petro estoy de acuerdo en unas cosas y no en otras, con Peñalosa estoy en desacuerdo con casi todo, y no solo yo, yo sabía que habían muchas personas en Bogotá que también estaban inconformes con muchos manejos administrativos de Peñalosa.
Si tu miras la revocatoria de Petro y la revocatoria de Peñalosa, son dos contextos totalmente diferentes, y es algo que la ciudadanía no entiende, porque la revocatoria a Petro no la radicaron ciudadanos como yo o como usted, fueron unos políticos, líderes o representantes, como Pacho Santos que estaban impulsando la revocatoria. Mientras nosotros como ciudadanos libres nos organizamos para defender nuestros derechos civiles y ciudadanos, tenemos derecho a elegir, ser elegidos y revocar mandatos. La otra diferencia importante es que ellos en ese momento podían tener la tranquilidad plena de que su revocatoria podía seguir su curso, nosotros nunca estuvimos en desacuerdo con la revocatoria, nosotros queríamos ir a las votaciones, nos parecía sano, en cambio en el escenario de hoy, los peñalosistas, los azules, no quieren ir a las urnas porque tienen miedo, saben que en el escenario de hoy Peñalosa se cae.
O.L. ¿Si hoy estuviera revocado Peñalosa que harían?
L.P. No somos los que tiramos la piedra y escondemos la mano, pero no queremos exponer representatividad política, de nosotros no va a salir un candidato a la Alcaldía. El hecho político que nunca se ha dado en este país, la revocatoria, nos puede dar una oportunidad única.
Con una Asamblea que vamos a convocar por estos días, dos meses después se van a convocar elecciones, entonces con esa Asamblea ciudadana vamos a redactar un mandato, un postulado hecho por el pueblo donde vamos a decir que queremos y que no queremos, vamos a presentarselo a los diferentes candidatos y a decirles “este es su programa de gobierno firmelo”, y que el ejercicio se pueda replicar para que caigan todo los que tengan que caer en este país de forma democrática.