Los futuros exalcaldes que pensarían buscar la presidencia

Análisis Por

Todavía queda un largo camino para las elecciones presidenciales de 2022, y falta por ver si el gobierno del presidente Iván Duque logrará consolidar a un sucesor fuerte de su mismo partido para ese año (teniendo en cuenta que no existe ya la reelección y que Duque hasta ahora se ha manifestado que no tiene intención de revivirla).

Pero este año terminan su periodo varios alcaldes y gobernadores que estarían interesados en lograr llegar a la Casa de Nariño, una meta en la que varios de ellos empezarían a trabajar desde el 1 de enero de 2020, y sobre todo teniendo en cuenta los resultados, apoyos y popularidad que poseen sus actuales administraciones y con las que cerrarían su gestión.

Los actuales mandatarios locales que (por motivos disciplinarios o por el tiempo que falta a la elección no han manifestado explícitamente una posible postulación presidencial) pero sí podrían buscar una oportunidad son:

Alex Char

Alejandro Char es el alcalde con mejor imagen del país, según la última encuesta Invamer, su aprobación está en el 89%, y el 77,2% de los encuestados cree que la ciudad está mejorando. Si para el 27 de octubre sale elegido su candidato, Jaime Pumarejo (quien hoy posee una intención de voto del 67%), los Char completarían 16 años consecutivos al frente de la capital del Atlántico.

De hecho, el poder de los Char se extiende por la Costa Caribe, aumentó en el número de parlamentarios en 2018, donde se cuentan directamente al menos 3 senadores relacionados con esa Casa (incluyendo al hermano del alcalde Char, Arturo), y en alianzas podría sumarse 3 adicionales, y 7 representantes a la Cámara.

Para muchos partidarios de Cambio Radical, partido de la entraña Char, la reciente pelea interna entre sus congresistas y el líder natural de esa colectividad Germán Vargas Lleras, se traduce en la intención del alcalde de intentar ser candidato presidencial en 2022, de la mano de un grupo político ya consolidado, y con una fuerte alianza de derecha, que incluye a un sector del Partido Conservador quienes ya han sido sus aliados en elecciones regionales.

Federico Gutiérrez

El alcalde de Medellín tiene una aprobación del 76,9% según Invamer, y el 53,9% de los encuestados cree que la ciudad está mejorando. Además, Gutiérrez se ha caracterizado por ser centro del debate nacional en varias oportunidades por sus declaraciones alrededor de terminar de estigmatizar a la ciudad con la imagen de Pablo Escobar, y por lo ocurrido con el proyecto Hidroituango.

El alcalde Gutiérrez se ha mostrado cercano al uribismo durante su administración, y su única debilidad es la percepción ciudadana sobre la labor inseguridad en la ciudad.

Una foto reciente entre Alex Char y Federico Gutiérrez, ha llevado a pensar en una fórmula presidencial de los actuales dos alcaldes mejor calificados del país.

Rodolfo Hernández

Polémico, y actualmente suspendido por la Procuraduría por golpear a un concejal frente a cámaras, el alcalde de Bucaramanga es relacionado por muchos analistas como el político más parecido a Donald Trump, su lenguaje directo, coloquial, y combativo, lo han mostrado como un mandatario lleno de escándalos, pero muy popular.

Este perfil populista le ha servido para tener una aprobación del 68,2%, y el 52,8% de los encuestados en esa ciudad cree que está mejorando, curiosamente sus banderas anticorrupción, no han servido para despejar esa preocupación en los bumangueses que la siguen considerando uno de los tres problemas más importantes de la ciudad.

Además, la intención de voto para elegir a su sucesor está en cabeza una persona distinta a su sector político. Pero el alcalde manifestó que continuará en la política (y por lo tanto contemplando un escenario nacional que podría incluir una candidatura presidencial), dependiendo de los resultados de octubre, donde espera se elija a alguien de su entraña, como lo manifestó a BluRadio.

Finalmente, estaría el caso de Dilian Francisca Toro, actual gobernadora del Valle del Cauca, quien lidera el más poderoso sector político del departamento, y ya fue presidenta del Congreso, un intento por ahora cuesta arriba, y dependiente igualmente de los resultados de octubre.